Importancia biótica y abiótica.

Pinus radiata es una especie forestal de gran importancia comercial en el mundo. Sin embargo, su área de distribución natural se encuentra restringida a sólo cinco poblaciones aisladas geográficamente. Tres de ellas se localizan en la zona costera de California, en Estados Unidos y las otras dos se encuentran en las islas mexicanas de Guadalupe y Cedros, frente a las costas de Baja California. A pesar de que todas las poblaciones nativas enfrentan problemas de conservación, como resultado de la presión de diversos agentes de disturbio ecológico, las poblaciones insulares están en condiciones más críticas, especialmente la de Isla Guadalupe, considerada como amenazada y en peligro de extinción.
En mayo de 2001 se llevó a cabo una expedición a Isla Guadalupe con el propósito de evaluar la situación actual de la población de Pinus radiata en la isla, obtener información de las principales amenazas que enfrenta, colectar muestras de germoplasma con fines de investigación y conservación, y explorar la posibilidad de iniciar un programa de restauración genética en dicha población. La expedición fue el resultado de un esfuerzo de colaboración de varias instituciones académicas y de investigación de México, Estados Unidos y Australia, con el apoyo y financiamiento de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), el programa UC-MEXUS de la Universidad de California, y las propias instituciones participantes en la investigación. El grupo estuvo integrado por un total de 14 personas de cinco países, con experiencia en diferentes disciplinas científicas y técnicas.
La restauración y conservación in situ de esta población es importante por diferentes razones de índole económica, ecológica y científica. Como resultado del aislamiento genético y de las condiciones ambientales particulares que existen en Isla Guadalupe, la población ha evolucionado como un ecotipo distinto con respecto a las poblaciones continentales de Pinus radiata en California. La población de Guadalupe presenta características morfológicas y adaptativas de importancia económica en el proceso de domesticación de la especie. Dichas características podrían ser de gran utilidad en un futuro próximo si se materializan los cambios climáticos que se pronostican en diversas regiones del mundo. Desde el punto de vista ecológico, la restauración de esta población nativa es esencial para mantener la integridad genética que permita la continuidad evolutiva en este hábitat particular. La conservación in situ de esta población permitirá además proteger a otras especies asociadas. Muchas de las especies que cohabitan y dependen de la presencia de los árboles de Pinus radiata en esta isla son también endémicas, por las condiciones propias del aislamiento evolutivo que han enfrentado. Desde el punto de vista científico, la restauración de la población presenta retos interesantes por las condiciones particulares del ambiente y de los individuos remanentes y puede servir de modelo para las acciones de restauración genética en otras poblaciones que tienen ante sí amenazas similares.